Es una infección micótica de los senos paranasales, el cerebro o los pulmones que se presenta sobre todo en personas con un sistema inmunitario debilitado.
Cigomicosis
La mucormicosis es causada por un hongo común que con frecuencia se encuentra en el suelo y entre la vegetación descompuesta. La mayoría de las personas entran en contacto con este hongo en algún momento, pero las personas que tienen un sistema inmunitario debilitado son más propensas a contraer esta infección.
Entre las afecciones más comúnmente asociadas con la mucormicosis están:
La mucormicosis puede involucrar:
Los síntomas de mucormicosis rinocerebral abarcan:
Los síntomas de la mucormicosis pulmonar abarcan:
Los síntomas de mucormicosis gastrointestinal abarcan:
Los síntomas de la mucormicosis del riñón (renal) abarcan:
Los síntomas de la mucormicosis de la piel (cutánea) abarcan: un área de piel única, dolorosa y endurecida que puede tener un centro ennegrecido.
El médico o el personal de enfermería le harán un examen. Se debe consultar con un otorrinolaringólogo si tiene problemas sinusales.
Los exámenes dependen de los síntomas, pero pueden abarcar: Se debe realizar una biopsia para hacer un diagnóstico definitivo de la mucormicosis.La cirugía se debe realizar inmediatamente para extraer todo tejido infectado y muerto. La intervención quirúrgica puede llevar a la desfiguración, debido a que puede involucrar la extirpación del paladar, partes de la nariz o partes del ojo. Sin embargo, las posibilidades de sobrevivir disminuyen enormemente sin dicha cirugía agresiva.
Usted también recibirá medicamentos antimicóticos a través de una vena, por lo general anfotericina B.
La mucormicosis tiene una tasa de mortalidad extremadamente alta incluso con una intervención quirúrgica agresiva. Las tasas de mortalidad fluctúan entre el 25 y el 85%, dependiendo del área del cuerpo involucrada y la salud general.
Las personas con sistemas inmunitarios debilitados y trastornos inmunológicos (incluyendo la diabetes) deben buscar atención médica si presentan fiebre, dolor de cabeza, dolor sinusal, inflamación ocular o cualquiera de los síntomas anteriormente mencionados.
Debido a que los hongos que ocasionan la enfermedad se diseminan fácilmente, las medidas preventivas más importantes involucran un mejor control de la enfermedad subyacente asociada con la mucormicosis.
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